MÉRIDA, VENEZUELA – 29 DE ENERO DE 2025 José Leopoldo Zambrano Dávila, de 60 años, quien trabaja como guardia de seguridad en el Zoológico Chorros de Milla, metió su mano en la jaula de la pareja de leones. Al parecer estaba borracho y quería acariciar al león. Los animales salvajes llamados Caribay y Karú reaccionaron instintivamente y lo atacaron. Le arrancaron un trozo del brazo.
Al ver esto, sus compañeros lograron detener el ataque, pero ya era demasiado tarde. José fue trasladado al Hospital Universitario de Los Andes con graves heridas, donde los médicos le dieron la mala noticia: le tuvieron que amputar el brazo.
Sus compañeros de trabajo testificaron que José llegó al trabajo muy borracho. Le aconsejaron que durmiera un poco, pero él los desobedeció y se fue a hacer su ronda habitual. Para llegar a la jaula del león, tuvo que saltar otra reja de seguridad.
Al ver esto, sus compañeros lograron detener el ataque, pero ya era demasiado tarde. José fue trasladado al Hospital Universitario de Los Andes con graves heridas, donde los médicos le dieron la mala noticia: le tuvieron que amputar el brazo.
Sus compañeros de trabajo testificaron que José llegó al trabajo muy borracho. Le aconsejaron que durmiera un poco, pero él los desobedeció y se fue a hacer su ronda habitual. Para llegar a la jaula del león, tuvo que saltar otra reja de seguridad.