En la víspera de Año Nuevo, un mecánico de automóviles llegó a la clínica y dijo que había una llave inglesa en su recto.
Proctólogos con éxito retiró el objeto extraño del ano de las manadasy cuando se le preguntó cómo la llave se metió en su trasero, el mecánico dijo que era una lesión industrial. Se tropezó y cayó con el ano en la llave inglesa.
Al mismo tiempo, el mecánico tomó la llave que había quitado con él.
Sin embargo, dos semanas después, el mismo mecánico apareció en la misma clínica con el mismo problema – una llave estaba atascada en su recto.
Cuando los médicos le preguntaron cómo la llave entró en su recto, el mecánico explicó que había habido una pelea en el taller de reparación de automóviles y que alguien había metido una llave en su ano.
Se retiró de nuevo la misma llave. El mecánico volvió a tomar la llave que había quitado de su ano con él.
Los proctólogos están apostando a si el desafortunado mecánico volverá por tercera vez con una llave en el trasero.
Proctólogos con éxito retiró el objeto extraño del ano de las manadasy cuando se le preguntó cómo la llave se metió en su trasero, el mecánico dijo que era una lesión industrial. Se tropezó y cayó con el ano en la llave inglesa.
Al mismo tiempo, el mecánico tomó la llave que había quitado con él.
Sin embargo, dos semanas después, el mismo mecánico apareció en la misma clínica con el mismo problema – una llave estaba atascada en su recto.
Cuando los médicos le preguntaron cómo la llave entró en su recto, el mecánico explicó que había habido una pelea en el taller de reparación de automóviles y que alguien había metido una llave en su ano.
Se retiró de nuevo la misma llave. El mecánico volvió a tomar la llave que había quitado de su ano con él.
Los proctólogos están apostando a si el desafortunado mecánico volverá por tercera vez con una llave en el trasero.