MANADO, INDONESIA – 3 DE DICIEMBRE DE 2024 Cuando los vecinos de la aldea Bahu Ward VI comenzaron a percibir un olor pútrido, comenzaron a buscar su origen. Cuando identificaron la unidad habitacional de la que podría provenir el olor, abrieron la puerta con la ayuda del administrador del edificio. Encontraron a una residente local de 21 años muerta, identificada como Juwita Apena. Ya estaba en estado de descomposición y toda hinchada. Fue vista con vida por última vez el 29 de noviembre de 2024.
En un primer examen de la víctima se determinó que sangraba por los ojos y la boca antes de morir. Sin embargo, la familia firmó una objeción a la autopsia, lo que complicó enormemente la investigación. La causa de su muerte sigue siendo desconocida hasta el día de hoy.
En un primer examen de la víctima se determinó que sangraba por los ojos y la boca antes de morir. Sin embargo, la familia firmó una objeción a la autopsia, lo que complicó enormemente la investigación. La causa de su muerte sigue siendo desconocida hasta el día de hoy.