Cita:
Una anciana con esquizofrenia se presentó con un par de tijeras que penetraban su órbita izquierda y un globo derecho enucleado. La tomografía computarizada (TC) reveló un par de tijeras que penetraban la fisura orbitaria superior, con las hojas viajando lateralmente al seno cavernoso izquierdo y al mesencéfalo y terminando justo por encima del hemisferio cerebeloso izquierdo.
Se le realizó craneotomía pterional izquierda y retiro de tijera, con inserción de drenaje ventricular externo. La exploración bajo anestesia no reveló rotura del globo izquierdo, pero sí se había separado el globo de la arteria y el nervio oftálmicos.
Otros antecedentes psiquiátricos de la paciente revelaron un mal cumplimiento de la medicación, lo que provocó intensas alucinaciones de la voz de su hijo fallecido que le decía que sus ojos eran "malignos" y que debían extirparse. Murió 5 meses después después de desarrollar un absceso intracraneal.
La autoenucleación es predominantemente una manifestación de psicosis, especialmente si hay delirios concurrentes de que los ojos del paciente representan una amenaza para él o sus seres queridos. El manejo inicial de emergencia incluye TC para descartar hemorragia subaracnoidea. Se deben considerar los antipsicóticos, tal vez incluso en ausencia de síntomas psicóticos debido a la casi certeza de una psicosis subyacente.
El tratamiento posterior del paciente hospitalizado incluye enfermería personalizada, guantes sin dedos y sujetabrazos; Ésta puede ser la única manera de evitar que pacientes engañados y decididos causen más daño a medida que los medicamentos antipsicóticos surtan efecto. La prevención es clave; Los profesionales de la salud mental deben estar alerta a los delirios sobre los ojos y considerar evaluar periódicamente el riesgo de automutilación del paciente.